Mis manos te tocarán con la suavidad de un respiro y en ti despertará la sospecha de la máxima humedad, entraré hasta donde rodea la tibieza de tu ser y con el lenguaje del roce preciso mis ideas tendrán en el tacto a su mejor interprete porque a veces las palabras parecieran que tocan y así quiero las sientas, sin preguntar nada, mirando a través de tu interior con la excitación como respuesta a tu pregunta yendo por tu cuerpo hacia el exceso.
Con lentitud en el recorrido y el deseo a la deriva que no ofrece ya regreso porque ¡He cerrado mis ojos y te he visto galopando desnuda por los paisajes de mi cuerpo.!